Denise Brett – «Contando nubes»
París, Análisis Freudiano, 25° Congreso Anual, octubre 2017
Introducción
¿Psicoanálisis como cura o como sanación?
¿Lo es, o no lo es? Esta no es la cuestión, sino una cuestión. Esto nos lleva a preguntar, ¿qué es el psicoanálisis? ¿Qué es su función? ¿Qué son sus efectos? ¿Cuáles son los resultados esperados? El psicoanálisis no pretende curar o sanar, pero como consecuencia del psicoanálisis, algo ocurre. ¿Qué es ese algo?
Estas son preguntas importantes, porque las respuestas a ellas determinan la dirección del tratamiento. En francés, tratamiento es traitement, traité es tratado. Se podría pensar que el resultado del psicoanálisis es un traité, o tratado, dentro de la dualidad del sujeto, una forma de acuerdo, una cierta paz dentro del sujeto, un equilibrio, una junción, una reestructuración y posiblemente desfragmentación. Sanar deja una cicatriz, y Lacan habla de la cicatriz dejada en el inconsciente en los cuatro conceptos fundamentales. 1 El uso que hace lacan del nudo borromeo nos lleva a entender la sanación como un anudamiento, tal vez una sutura en el buen lugar. Existe un proverbio inglés que dice: “A stitch in time saves nine” (Un punto de sutura a tiempo puede salvar a nueve).
El concepto de sanar o curar nos lleva a la pregunta, ¿para quién? o ¿para qué? Responder a esto es fundamental para la dirección del tratamiento. Suprimir o curar la enfermedad no es necesariamente una solución, ya que es esta enfermedad que nos hace humanos. Si enfermedad se opone a bienestar, entonces el psicoanálisis no quita la enfermedad, de alguna manera en su proceso, es la causa de ella. Y a pesar de todo, vivimos en una sociedad que no solo cree en suprimir el síntoma, sino que también deberíamos intervenir al nivel genético.
Guérir significa sanar en francés. Guérir viene de la palabra, en francés antiguo, guarir, que significa garantizar, proteger, dar salud, esconder. Y aun así, el psicoanálisis no garantiza nada. Esconder podría entenderse como cubrir o recubrir. Tiene una resonancia interesante para el psicoanálisis, porque recubrir significa mejorar, restaurarse, restablecerse, o cubrirse otra vez, dejando algo siempre escondido.
A mi me suena como a “guerre”, guerra. ¿Una guerra dentro del sujeto dividido?
Finalmente, guérison que significa sanación en francés, también suena como garrison (regimiento), también asociado a la guerra y a la defensa.
¿Qué es una cura?
La noción de cura tiene un aspecto universal, por ejemplo: la cura de un cáncer, la cura de un diabetes. No hay nada de universal en un psicoanálisis, actuamos en una lógica casuística; podemos encontrar una cura, puede ser una palabra o una frase, pero solo funciona para una persona, no para todos, y en este sentido el psicoanálisis no es una cura. Una cura involucra prescripciones, tiene que ser mesurable contra muchos casos.
Por muchas razones este tipo de mensurabilidad no es posible en el psicoanálisis. Seria como contar nubes, no sirve y es difícil de hacer; ellos se mueven mas allá de nuestro entendimiento, y una conclusión nunca dura mucho. Sin embargo, al decir que el psicoanálisis no es una cura en si, no digo que es porque no es suficientemente bueno, o que hay otra cura mejor.
Para encontrar la cura de algo, hay que definir este algo, y este es el problema, porque eso es imposible, ya que podemos concordar que todos somos distintos, si nos acordamos en la variación humana. Lo que puede ser un problema para uno puede no serlo para otro. Si elegimos la búsqueda del placer o la preservación del dolor, tendremos problemas distintos. O si miramos hacia fuera o hacia dentro para nuestra satisfacción. Si seguimos un culto religioso o si creemos que no existe nada mas allá. Como lo señala Freud en “La Civilización y sus descontentos” 2, es distinto para cada uno de nosotros. Es distinto, y si bien podemos encontrar similitudes y agrupar la gente en función de ellas como lo impondría la Ciencia, esto no dejaría de ser una clasificación reductora, limitada por nuestro concepto de las dimensiones involucradas, y no podrá nunca representar la totalidad. Incluso dentro de las estructuras hay divergencias. Deberíamos tomar cuidado y no limitar el psicoanálisis a lo que podemos entender, o observar, o mesurar. No es porque no podemos comprender todos los detalles al mismo tiempo que no existen.
Curar en inglés también significa reparar o arreglar, como una goma de pegar o un pedazo cerámica, después de curado ya no es maleable o alterable. Ser clasificado como una cura requiere negar la individualidad de cada uno.
La cuestión por lo tanto es, ¿qué esta siendo curado?
El psicoanálisis no aspira a curar síntomas, ellos sirven sus dueños y es solamente si fallan que esta persona busca una terapia, no para curar sus síntomas sino para reconstruirlos.
La condición humana podría ser considerada como un padecimiento, una enfermedad. Curarla es suprimir nuestra humanidad; lo que nos lleva a nuestra cultura moderna, con genética y robótica. Un genoma se refiera a un conjunto completo de cromosomas; todos los rasgos hereditarios de un organismo. Unas de las investigaciones mas recientes sobre la cura de enfermedades genéticas involucran la alteración de estos genomas, para suprimir el elemento heredable de la enfermedad. Como seres humanos, heredamos de nuestros padres y abuelos. Suprimir elementos hereditarios y alterar genomas es suprimir defectos y aspirar a hacer personas perfectas. ¡La cura ultima!
¿Dónde termina esta búsqueda de perfección?
Las maquinas son mas rápidas y mas eficientes, no son emotivas, no se enferman y no necesitan vacaciones, luego no hay tiempo de inactividad. A medida que la ciencia progresa, podemos ver el movimiento hacia la integración humano/maquina. Podemos ver el inicio de eso con algo como los chips NFC (comunicación de campo cercano), un chip que permite realizar pagos sin contacto. De hecho, usted puede ahora comprar en Amazon lo necesario para implantarse su propio NFC chip en su mano ¡y lo único que tiene que hacer es mover la mano para pagar! Esta idea de cura nos puede llevar ahí, a la búsqueda de perfección y hacia la robotización de los humanos.
Siempre asumimos que en el área de inteligencia artificial, los programadores aprendan algo de psicología, o que al menos la ciencia tome algunas indicaciones sobre inteligencia humana, emociones, etc. de las ciencias sociales o de las humanidades. Y a pesar de eso, algunas de las innovaciones mas progresistas en el área de la tecnología pueden también proporcionarnos con un mejor entendimiento de cómo la mente humana funciona. Me refiero a la tecnología blockchain. Para explicar mi argumento, daré una visión general muy breve y simple, de un elemento muy pequeño de esta tecnología. Un elemento de este espacio de almacenamiento esta relacionado con la conservación de archivos. Todo espacio de almacenamiento contiene no solo archivos o eventos, sino también todo lo que vino antes, y así hay una conservación totalmente incorruptible de archivos y eventos. Luego los archivos son almacenados y sellados en bloques en una cadena. En “La civilización y sus descontentos”, Freud habla de cómo seria si intentáramos representar un recuerdo en una imagen, y da el ejemplo de la ciudad de Roma, señalando lo difícil que seria imaginar todo lo existente al mismo tiempo, ocupando el mismo espacio. Freud señala que no es una representación adecuada de la memoria, porque todas nuestras memorias existen, año tras año; y nos recordamos como se veían lugares distintos en momentos distintos y no es posible representar eso en imágenes. La tecnología blockchain busca solucionar este problema. Cualquier dato nuevo podría ser considerado como un nuevo recuerdo. Existe, pero coexiste con los otros recuerdos que pasaron antes. No los borra, porque el recuerdo o el dato original permanece. El nuevo recuerdo es mas actual, pero no es el único activo. Sin embargo, esto todavía no vale para la interacción compleja que ocurre entre los recuerdos y las experiencias que son totalmente individuales, y que por lo tanto no son mensurables en una escala global.
Luego, ¿qué es ese algo que ocurre en el análisis?
No es evidente y no hay una respuesta simple, y aun así hay una respuesta. Es enigmático y complejo pero a la vez, no lo es. Como las nubes, los ves, y justo cuando crees que entendiste algo de su forma, ya no son, cambiaron, se deslizaron, de manera muy similar al entendimiento que tenemos del inconsciente.
Lo que sí sabemos es que para que haya un análisis necesitamos a dos personas. El analista y el paciente, ambos siendo sujetos humanos, sujetos divididos.
Lacan dice3 “es como una restitución del sujeto dividido por la operación del lenguaje que el análisis circula”. Lacan diferencia el análisis y la ciencia, y dice que la ciencia vuelve el objeto en un sujeto, aunque el sujeto es dividido.
Al entrar en el mundo del lenguaje, el sujeto se vuelve dividido, y es este sujeto dividido que vemos en la clínica. Según Lacan, el Análisis circula la restitución de este sujeto dividido. Restitución implica retornar a un estado anterior, pero el análisis no restituye, circula con la intención de modificar. 4
Lo Real es afuera del lenguaje y el psicoanálisis permite la simbolización de alguna parte de la realidad, al poner palabras sobre lo indecible.
Equivoco
Lacan dice que la única arma en contra del síntoma es el equivoco.5 Esto significa que en el análisis, usamos el lenguaje, el sentido de las palabras, y sus homófonos. Equivoco es una de las herramientas que el analista usa para liberar el paciente de sus síntomas. El significante que hace eco para un paciente no es el mismo que para otro paciente, son específicos, y una vez mas, se interpretan casuísticamente.
Al aferrarse con estos conceptos, uno puede confundirse, y es difícil, algunos podrían incluso decir imposible, ya que estamos usando un sistema de lenguaje para explicar algo que se encuentra fuera de ello. Lacan habla de obstáculos encontrados por el deseo de conocimiento, y dice que es por eso que inventó el nudo, como encarnación de este obstáculo. 6
¿Qué es este nudo, pues?
Es un nudo borromeo, hecho de tres anillos de cuerda. Lacan se vuelve hacia la topología y usa el nudo para representar tres registros de discursos: lo Real, lo Simbólico, y lo Imaginario.7 Cada anillo esta conectado de tal manera que cortar uno resulta en desconectarlos todos. Cada anillo está a la vez dentro de un anillo y fuera del otro anillo. Cada registro existe limitado por la existencia de los dos otros. Resiste a la imaginación, no tiene espejo, y por eso es difícil de entender. (Diagrama 1)
En la configuración inicial, el sitúa el sentido en la intersección entre lo Imaginario y lo Simbólico, tras evidenciar que el nudo borromeo es un nudo, diciéndonos que es un falso nudo, y que es en realidad una cadena. (Diagrama 2).
Cuando los tres anillos no se mantienen juntos en un nudo borromeo, Lacan indica que inventar un Sínthoma es sanar un nudo fallido, relocalizando el psicoanálisis en el área de la sanación. El Sínthoma es el cuarto elemento del nudo, atado de manera borromea. Es decir que todos están atados entre si. También es conocido como un nudo bruneano. Lacan usa el nudo para representar lo que recae afuera del lenguaje. También habla de las diferencias entre 2 y 3 dimensiones, e incluso 4 dimensiones con la agregación del cuarto anillo, y mas, lo que supera nuestra capacidad de imaginación (Diagrama 3).
El nudo nos ayuda a entender la compleja interacción entre los 3 registros, cómo se entrecruzan en juegos de superposición, entretejidos. El anudamiento de los 3 registros es como una trenza, que solo se puede distinguir visualmente gracias a los colores. (Diagrama 4)
La terapia del habla
El psicoanálisis nos permite salir de la asunción de una existencia predeterminada, en la cual todo movimiento y evento ya estaría decidido. Nos permite darnos cuenta de nuestra responsabilidad individual, en las decisiones que cada sujeto puede tomar, construyendo su propia realidad, mas allá de predeterminaciones.
Por lo tanto, el psicoanálisis nos cura de la limitación de insignificancia. Y esto es muy interesante, porque lo hacemos mediante el significante.
Para regresar a sus orígenes y al descubrimiento de que hablar puede llevar a curar síntomas con el caso de Anna O, el psicoanálisis aparece como una cura, pero la pregunta sigue valida: ¿una cura para qué? En algunos casos, puede ser una cura del síntoma, si es lo que se requiere, en otros casos, definitivamente no lo es.
Luego, es a veces una cura, a veces una sanación, a veces ambos y a veces ninguno. De ahí viene la idea de mi titulo. La ciencia quiere clasificar para mesurar y tratar. La presunción es que si podemos identificar A entonces sabemos como tratarlo, pero A no es universal, no es como tratar una infección bacteriana con antibióticos. No hay soluciones pre-establecidas que podemos aplicar a todos. El psicoanálisis no es la practica de una teoría, sino la teorización de una praxis.8
No se trata de escuchar para confirmar lo que creemos saber, se trata de escuchar para analizar lo que se destaca, los deslices. En el Seminario RSI, Lacan habla de la diferencia entre la superficie y el símbolo, y se refiere al libro de Adams. 9 En el libro, Adams estudia el libro de Joyce, Ulises, y para encontrar el significado de las palabras de Joyce, separa la superficie, es decir la descripción propiamente dicha de Dublín, de los símbolos, lo que se destaca como no estando en su lugar. El psicoanálisis se acerca a eso, el analista escucha buscando lo que no encuadra, lo que sobresale.
Cuando hemos etiquetado algo, luego lo podemos mesurar, pero necesitamos saber qué estamos mesurando. Una persona puede ser curada, otra sanada, otra los dos a la vez, y para un ultimo, puede no tener efecto, pero algo sucede, cambió, puede que se hayan despertado, tal vez ven el mundo de otra manera, pueden tener todavía sus síntomas o nuevos Sínthomas, pero ¿cómo lo podemos mesurar, si no uno por uno, caso por caso?
Volvamos a la pregunta, ¿es el psicoanálisis una cura o una sanación? Es un tratamiento, es un despertar, una intervención en lo real y por lo tanto y hasta cierto punto, existe afuera del lenguaje; a pesar de estar operando dentro del lenguaje. De manera muy similar a la banda de Moebius, tiene un interior y un exterior que son uno. En el Seminario XX, Lacan habla del Uno, y dice que hay Uno y nada mas que el Uno. Hay una unidad, un continuum, una conectividad.
El psicoanálisis permite al sujeto que altere sus síntomas cuando se han vuelto un obstáculo, y que los transforme en Sínthomas que funcionan para él. Esto implica superar una reacción al gran Otro en la construcción de la realidad propia de uno.
Tratamiento
El psicoanálisis no opera como el locus del síntoma, opera desde el locus de la subjetividad.
El psicoanálisis es un tratamiento, es como el procedimiento de una cirugía psíquica, y sí, procedimiento es la palabra perfecta, porque implica que algo está hecho, sin decir qué. Pero esta cirugía es llevada a cabo mediante palabras, en la esfera del lenguaje. Es una operación sobre el inconsciente, usando palabras. Es la única ‘terapia’ que reconoce que las palabras son determinantes, que tienen un poder de cambio y que, in fine, pueden marcar el sujeto. En Irlanda, tenemos el dicho ‘marca mis palabras’, típicamente usado por padres que afirman que lo que acaban de decir va a ocurrir. En general, se dice cuando predicen que algo vaya a ocurrir, como consecuencia de un comportamiento. Pero es un uso interesante del lenguaje. Todos los niños son marcados por las palabras de sus padres.
¿Para quién es el tratamiento?
La mayoría de las psicoterapias, en especial las CBT (sigla inglesa de terapias cognitivo-conductuales) buscan hacer del paciente un mejor miembro de la sociedad, ayudándoles a adecuarse con lo que se espera de ellos. Los hacen conformarse a los imperativos del Superyo. Uno podría decir que el psicoanálisis está al opuesto de eso, pero al mismo tiempo existe debido a eso.
El tratamiento es para los sujetos divididos del individuo, uno por uno, ayudando a cada uno seguir sus deseos, no lo que impone el gran Otro.
Concluyendo
No se disputa el psicoanálisis como cura o sanación, lo que sea que cure o sane. Podemos escondernos detrás de nuestra jerga y de términos complejos, pero al final, el análisis opera en lo Real y aunque se puedan observar sus efectos en la realidad, una descripción exacta del mecanismo es compleja; y el lenguaje es un instrumento tosco en materia de explicación. Todos somos distintos, y cada sujeto construye su propio Sínthoma.
Un punto de sutura a veces salva a 9. Lacan quiere decir que para el sujeto psicótico, un quiebre en un solo registro puede derrumbar a todo. Sin embargo, para los demás, pueden ser necesarios dos quiebres en el nudo para desatarlo, en función de su formación, por lo tanto la formación de un Sínthoma o de una sutura en el espacio adecuado puede evitar el derrumbe del sujeto. Lacan también dice que el Real es un núcleo que el pensamiento rodea, y es su cicatriz. Una cicatriz es la marca de una herida sanada. Otra vez, una referencia a la sanación y a las cicatrices dejadas en el inconsciente. 10
1 Lacan, Los cuatro conceptos fundamentales del Psicoanálisis, El inconsciente freudiano y el nuestro, p.22
2 Freud, La Civilización y sus descontentos
3 El Sinthoma, p.10
4 Ibid, p. 11
6 Ibid, p.10
7 Lacan, J. RSI
8 Lacan
10 Lacan, El Sínthoma, p.47